Tengo una bicicleta,
que tiene un manillar,
pedales y dos ruedas
que no paran de rodar.
es mi mejor amiga,
casi todos los días la cojo,
pues a mí me alegra la vida.
La manejo por las cuestas,
también por las aceras
por el carril de bicis,
la llevo por donde quieras.
Me salen agujetas,
pero a mí me da igual,
el caso es que mi bicicleta
aparcada no puede estar.